Tras este día el panorama general se resume en una palabra, coaliciones. Durante estas semanas todos los partidos políticos estarán en vilo por ver qué acuerdos son posibles y qué condiciones van a poner para llevarlos a cabo.
Con todos los votos ya escrutados el reparto de escaños es tal que así, el PP gana las elecciones con 123 escaños, pero sin conseguir la mayoría absoluta y logrando el segundo peor resultado de su historia electoral, el PSOE se sitúa como segunda fuerza con 90 escaños, Podemos se queda con el tercer puesto (69 escaños) y Ciutadans con el cuarto (40 escaños).
Pese a los augurios de las encuestas, algunas incluso sitúaban s C’s como segunda fuerza detrás del PP, los resultados electorales han sido bastante aleatorios y no han castigado con tanta fuerza al bipartidismo, aunque si volvieran a realizar otras votaciones, no se podría saber si aguantaría tan bien el duelo como en esta ocasión.
Por los resultados vemos claramente los puntos clave de cada partido, en el Oeste de Andalucía el PSOE se sitúa como primera fuerza, Cataluña y País Vasco se dividen entre Podemos y los partidos pro-independencia y en el resto de España gana el PP. Gracias a esto podemos observar el fuerte tirón que ha pegado Podemos gracias a un discurso templado y en apoyo de la plurinacionalidad de España.
Esto mismo puede acarrearle problemas a la hora de establecer un pacto con el PSOE, de momento es pronto para decir lo que va a pasar con respecto a este tema, lo que es un hecho es que el fuerte castigo de Ciudadanos en las urnas le ha impedido ofrecer al PP una coalición que la llevara al gobierno.
En definitiva, estos resultados ofrecen un panorama muy diferente al de 2011, sin ningún partido con mayoría el futuro se presenta bastante incierto, aunque es cierto que ha sido un gran triunfo para partidos que hace 4 años ni si quiera existían o tenían representación en la cámara.
Si hablamos sobre el senado los resultados son distintos, la mayoría del PP va a modificar sin duda la importancia de esta institución, pues las leyes del Congreso tienen que pasar por él y sin duda va a alterar la situación legislativa en España y seguramente impida que los partidos de izquierdas puedan hacer reformas.
También debemos mencionar la necesidad que existe por buscar un modelo electoral mucho más justo y proporcional para cambiarlo por el actual (Ley D’Hondt + circunscripción provincial), que sólo beneficia a los partidos con mayor número de votos y que impide que exista una democracia justa en nuestro país.